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UN CAMION ESCONDIA OTROS 500 KILOS

Diario: El Mundo

Fecha: 30/04/2002

Palabras clave: Cocaína, Laboratorio, Cartel de Cali

Tema: Cocaína

UN CAMION ESCONDIA OTROS 500 KILOS
Hallado un laboratorio con 170 kilos de cocaína en el barrio de Salamanca

LUIS FERNANDO DURAN

El cartel de Cali había montado en pleno corazón de Madrid una de sus mayores fábricas de cocaína de Europa. Pero la sucursal sólo ha podido trabajar un mes gracias al olfato de la policía. El pasado viernes la policía entraba en el laboratorio, ubicado en un apartamento de la calle de General Pardiñas (distrito de Salamanca), y descubría 170 kilos de cocaína de gran pureza, el mayor alijo hallado en la ciudad de Madrid desde 1993, según la Jefatura Superior de Policía. La droga incautada está valorada en 21 millones de euros y podría convertirse en el mercado negro en más de un millón de dosis.



Como responsables de esta banda de narcotraficantes del barrio de Salamanca se han detenido a seis personas, que utilizaban como tapadera el restaurante Zapa, en la calle de General Oráa.La camaleónica banda, que dormía cada día en una casa distinta, distribuía la cocaína por toda España y enviaba los pingües beneficios a Colombia.

En la redada también se encontraron con una manta repleta de joyas, 185.560 euros, un millón de pesetas y un completo laboratorio de adulteración y manipulación de cocaína: prensa hidráulica, moldes, 140 litros de disolventes, 25 kilos de sustancias químicas y troqueles originales para confeccionar los ladrillos de cocaína.

La investigación de esta operación ha sido efectuada por el Grupo XV de la Brigada Provincial de Policía Judicial. Y arrancó a raíz de operaciones de menor magnitud, que pusieron a la policía tras la pista definitiva.

El 19 de noviembre de 2001, la policía requisaba un kilo de cocaína y detenía a nueve colombianos. Tirando del hilo, los agentes arrestaban a primeros de abril a otros dos presuntos traficantes e intervenían un kilo de cocaína. También se descubrían unos moldes para confeccionar los ladrillos de cocaína y numerosa documentación en la que se halló el nombre de Camilo y varias direcciones relacionadas con los detenidos anteriores.

La policía descubrió que Camilo tenía relación con el restaurante Zapa, era su propietario, y su comportamiento despertó las sospechas de la policía. Enseguida se le vinculó con Harold T. G., de 34 años. Durante más de dos semana, la policía siguió, durante las 24 horas del día, a los supuestos delincuentes.

La semana pasada, los sospechosos extremaron sus medidas de seguridad ante la llegada masiva de productos químicos a uno de sus pisos.Todo hacía pensar que el grupo estaba en fase de adulterar la droga para darle salida con rapidez, por lo que los agentes decidieron intervenir. Con el correspondiente mandamiento judicial, procedieron a la entrada y registro de uno de los inmuebles de la organización, en la calle de General Pardiñas.

Uno de los sospechosos, Humberto Antonio, de 37 años, opuso fuerte resistencia al arresto y lesionó a un agente. También Doris Jannette, de 23 años, trató de escapar a la carrera y cuando fue alcanzada por la agente que la seguía, le dio fuertes patadas que le causaron numerosos hematomas.

En el interior del domicilio estaba el laboratorio de adulteración y manipulación de la droga. Según Enrique Ulla, comisario jefe de la Brigada de Policía Judicial, «no es frecuente que los traficantes lleven a cabo estas labores en pleno centro de la capital, debido a las fuertes emanaciones que desprenden los disolventes químicos utilizados para adulterar la droga».

Los narcotraficantes cambiaban a dólares el dinero obtenido y, a continuación, o bien lo envíaban a Colombia mediante pequeñas transferencias de 500.000 pesetas o bien le daban salida física a través de personas de la organización que realizaban importantes inversiones inmobiliarias en aquel país.

Se calcula que la banda ha obtenido más de tres millones de euros con la venta de droga realizada antes de su detención. Ulla agregó que la banda introducía la droga en España a través de puertos marítimos, principalmente de Levante. Además, los narcotraficantes disponían de un piso en la calle de Arroyo del Fresno y otro en la calle de Cidra.



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«Parecían muy buena gente»
Sorpresa, estupor y vértigo. Sus vecinos eran una poderosa banda de narcotraficantes y ellos se enteraron, el pasado viernes, al ver a la policía salir de la quinta planta del piso de la calle de General Pardiñas. «Eran muy majos, parecían buena gente», comentó ayer una inquilina.

La red también utilizaba como tapadera el restaurante Zapa, ubicado en la confluencia de General Oráa y General Pardiñas, en el distrito de Salamanca, como escenario del mercadeo de droga. El negocio estaba ayer cerrado. «Aquí venían ejecutivos y gente de empresa, pero quién iba a saber que no sólo cocinaban comida», comentó un vecino.

6Los efectivos del Samur realizaron entre el domingo y el lunes 407 intervenciones, un 52% más que en un día habitual, lo que supone el récord de actuaciones hasta ahora realizadas en un sólo día por este servicio, que estuvo en algunos momentos al borde de la saturación.

En otra operación contra el narcotráfico, la Comandancia de la Guardia Civil ha descubierto 500 kilos de cocaína y 870 de hachís ocultos en el doble fondo de un camión que viajaba desde Madrid a Murcia. Con este hallazgo se han detenido a 49 personas integrantes de una red internacional, desenmascarada con la colaboración de la Guardia Civil de Murcia y Girona. Según las investigaciones de la Guardia Civil, la organización clandestina traía la droga por barco hasta el Levante. Luego, utilizaban una empresa de transportes de camiones para camuflar un negocio de distribución de polvo blanco y otras sustancias estupefacientes.

En la operación del barrio de Salamanca llama la atención el hecho de que, por primera vez, una organización de narcotraficantes emplee un piso céntrico para manipular la cocaína. Para absorber las emanaciones de acetona y metanol, y evitar que los vecinos les delatasen, la red había colocado dentro de la casa cerca de un centenar de ambientadores y perfumadores.

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