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El plan piloto de la Generalitat que paga por dejar de fumar sólo logra un 30% de éxitos

Diario: La Vanguardia

Fecha: 01/06/2002

Palabras clave: Fumadores, Hábito, Objetivos, Éxitos

Tema: Publicidad

Sanitat considera que el proyecto, iniciado en el Pla de l'Estany, ha conseguido sus objetivos, y ha anunciado que en los próximos meses lo extenderá a otras comarcas
El plan piloto de la Generalitat que paga por dejar de fumar sólo logra un 30% de éxitos

MARTA RICART
BARCELONA. - Un 30% de los fumadores que se acogen al plan piloto de la Generalitat para dejar de fumar ha abandonado este hábito. Este plan prevé reembolsar el coste del tratamiento a quien haya dejado de fumar durante seis meses. Así lo indican los resultados preliminares de la prueba realizada en la comarca gerundense del Pla de l'Estany, donde se apuntaron al programa 310 fumadores. Otras 200 personas en el Montsià y Urgell participan en el mismo programa, aunque en ambas comarcas aún no se dispone de todos los resultados. En la conselleria se prevé extender la prueba.

El programa se lanzó en mayo del año pasado. Quien quería participar debía inscribirse, los médicos le hacían una entrevista y recetaban el tratamiento adecuado. A los seis meses debe acreditar que se mantiene alejado del tabaco. Para ello se hace a los participantes en el programa una nueva entrevista y una prueba bioquímica -un análisis de orina para detectar cotinina, restos de nicotina en el organismo-. En el Pla de l'Estany, los datos disponibles indican que un 30% de los participantes se ha mantenido seis meses sin fumar. "El porcentaje es un éxito al ser un programa en que los ex fumadores hacen vida normal", afirma el director general de Salut Pública de la Generalitat, Lluís Salleras.

Ahora habrá que ver los resultados en las otras dos comarcas. Sanitat analizará esos resultados y los costes -aún no cerrados- de reembolsar el tratamiento a todos estos ex fumadores. Salleras avanzó que la intención es extender el programa. En principio, se hará seguramente de manera limitada: a los pacientes que quieran apuntarse en los centros de asistencia primaria que entran en el programa "Libres de humo". Son unos 25 centros, donde el personal se compromete a no fumar y ofrece a los pacientes los programas para dejar el tabaco.

El programa de reembolso ha tenido muchas menos adhesiones de las que se esperaba y además despertó cierta polémica entre colectivos de afectados por otras patologías, que consideran que los recursos que se dedican a ayudar a los fumadores deberían dedicarse con prioridad a otros pacientes. Pero Salleras defiende que el coste es muy reducido y es un gran paso si ayuda a más personas a dejar de fumar, dados los elevados costes sanitarios del tabaquismo. Su adicción cuesta al fumador un mínimo de 600 euros al año. La campaña preveía pagar como máximo 300 euros a cada fumador, suma que cubriría el tratamiento.

De la experiencia de Girona resulta que un 45% de los participantes se trató con bupropión, el único fármaco existente para dejar de fumar -envuelto en la polémica porque en algunos países europeos se relaciona con graves efectos adversos- y otro número similar recurrió al parche de nicotina. El 10% restante usó chicles de nicotina. Unos pocos fumadores no han requerido fármacos.

Los nuevos ex fumadores son la mitad mujeres y la mitad hombres y cinco son menores de 20 años. La mayoría está entre 25 y 45 años.