Diario: Estrella Digital
Fecha: 14/02/2002
Palabras clave: Alcohol, Trabajos Sociales, Menores
Tema: Alcohol
El Gobierno estudia la posibilidad de imponer trabajos sociales a los menores que beban alcohol
Rajoy explica que la normativa se desarrollará con el "equilibrio necesario", de forma que no afecte ni a las fiestas populares ni a las terrazas en las vías públicas
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El ministro del Interior, Mariano Rajoy, ofreció ayer nuevos detalles sobre la ley que regulará el consumo de alcohol de los jóvenes y señaló que se estudiará la posibilidad de imponer trabajos sociales a los infractores, mientras desde las CCAA opinaron sobre la propuesta y algunas anunciaron medidas. Tras anunciar el pasado martes que la nueva ley prohibirá el acceso al alcohol de los menores de 18 años y el consumo en la vía pública, Rajoy señaló ayer que la nueva normativa se desarrollará con el "equilibrio necesario", de tal forma que no afectará ni a las fiestas populares ni a las terrazas en las vías públicas, ni, por ejemplo, "a una persona que se bebe una cerveza por la calle". Rajoy insistió en que la norma se dirigirá fundamentalmente a evitar las grandes concentraciones de jóvenes que se producen en las ciudades los fines de semana "con grave perjuicio para los vecinos" y que se presionará a los establecimientos públicos alrededor de los cuales se organizan estas situaciones. El también vicepresidente primero del Gobierno, que se mostró contrario a sancionar a un menor penalmente o con una multa pecuniaria, dijo que en algunos juzgados españoles se han adoptado ya medidas en el sentido de que los infractores realicen trabajos sociales, y sostuvo que este asunto no está cerrado y se debatirá en la Conferencia sectorial con las Comunidades Autónomas.En Toledo, el consejero Portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, anunció que se estudia endurecer la normativa mediante "mayores limitaciones" al consumo de alcohol en determinados lugares y horarios. García-Page puntualizó que el fenómeno del "botellón" tiene distintas consideraciones, una de las cuales, la que conlleva "una concentración numerosa de gente que afecta al orden público y a la seguridad y tranquilidad de las personas, puede abordarse sin modificación legal alguna".La Generalitat catalana señaló que ve "conveniente" la propuesta del Gobierno para elevar a los 18 años la edad para poder consumir bebidas alcohólicas y prohibir su consumo en la vía pública, aunque ha advertido que, si no se adoptan medidas educativas y de información, por si sola no acabará con el "botellón".Participación de las CCAAAyer en la segunda jornada del Congreso 'Jóvenes, noche y alcohol', participaron representantes de Comunidades Autónomas. El director general de Drogodependencias de la Generalitat valenciana, Bartolomé Pérez, anunció que en su comunidad se va a prohibir la publicidad estática de alcohol y tabaco a menos de 900 metros de centros educativos, sociales y hospitales, "con lo que se busca bajar la densidad de esa publicidad y que se retire del casco urbano". En esa misma línea, el director general de Drogodependencias de Cataluña, Joan Colom, dijo que en su territorio se prohibirá toda la publicidad estática de bebidas de más de 23 grados. El director general de Acción Social de Cantabria, César Pascual, anunció que su comunidad va a pedir la responsabilidad solidaria de los padres o tutores de los menores que beban en la vía pública, y el director de la Agencia Antidroga de la Comunidad de Madrid, José Manuel Torrecilla, destacó que "lo importante" no es que se beba en la calle "sino el alcohol" y que "hay que tratar la enfermedad, no el síntoma".En Valencia, la alcaldesa de esta ciudad y presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias, Rita Barberá, afirmó que los Ayuntamientos necesitan "recursos y competencias" para poder actuar con eficacia contra el "botellón". En Sevilla, el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, consideró "imprescindible" que cualquier medida que tome el Gobierno sobre el denominado "botellón" juvenil, para que sea efectiva, debe contar con el consenso y el "beneplácito" de los jóvenes, de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos.La Dirección de Drogodependencias del Gobierno Vasco denunció el "alarmismo malintencionado" que, a su juicio, se ha generado en torno al consumo de bebidas alcohólicas por parte de jóvenes, y entiende que "la prohibición no es la solución" al problema. El viceconsejero melillense de Sanidad, Miguel Marín, dijo que las autoridades de esta ciudad ya han elevado a los 18 años la edad para poder consumir alcohol, aunque sólo se actuará contra el "botellón" en caso de que la aglomeración de jóvenes produzca molestias a los vecinos.En un comunicado, la Federación Española de Bebidas Espirituosas (FEBE) propuso ayer la creación de una Comisión Parlamentaria sobre el tema del alcohol y la juventud, así como la fundación de un Plan Nacional sobre el Alcohol. De acuerdo a la Federación Española de Bebidas Espirituosas es preciso una distinción entre "consumo y abuso, respetando los hábitos lícitos del consumidor moderado y adulto y los aspectos culturales que diferencian a la sociedad española", así como lacreación de una asignatura, dentro de los planes educativos existentes.Por su parte, el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, Pedro Núñez Morgades, se refirió al anuncio del Gobierno y dijo que "es una medida necesaria, pero debe ser complementada", al tiempo que abogó por la creación de una mesa nacional de debate social sobre esta cuestión.
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