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ARTÍCULOS DE OPINIÓN

Algo más sobre las drogas – mezclas

Joan Manuel Riera Casany
Voluntario social

Casi todos los accidentes sanitarios están motivados por las mezclas de drogas, particularmente y de las más peligrosas mezclar drogas con alcohol, paradójico ¿no?, Las drogas ilegales mezcladas con alcohol producen muchas veces efectos devastadores que terminan incluso con la muerte. Contradictorio, la droga legal es la más mala combinada con ilegales, dejando a un lado que sola ya es de las peores. Ante esta realidad ¿que defensa plantean los partidarios de legales e ilegales?  En un reciente estudio ingles por peligrosidad de las drogas el alcohol entre 18 drogas esta en el puesto 5 y en lo que afecta a peligrosidad social ocupa el número 1. El alcohol entre 18 tipos de droga se instala en el número 8 en poder adictivo. En otros estudios se clasifican: en dependencia física la tiene muy fuerte, en dependencia psíquica muy fuerte, en toxicidad fuerte, en neurotoxicidad fuerte.

El consumo excesivo de alcohol es una de las causas más frecuentes de transgresiones sociales como violaciones y riñas, práctica de sexo sin medios de protección, abandono familiar y laboral. Se vincula a nivel mundial con el 50 % de las muertes ocurridas en accidentes de tránsito y el 30 % de los homicidios y arrestos policiales. Reduce de 10 a 15 años la expectativa de vida y determina el 30 % de las admisiones psiquiátricas y el 8 % de los ingresos por psicosis. También se ha responsabilizado con casi la mitad de los condenados por faltas y delitos tan graves como asesinatos. En este medio se relaciona con la tercera parte de los hechos delictivos y violentos y entre el 20 y el 25 % de las muertes por accidentes. A esto deberíamos añadir todo lo ocurrido por la mezcla de otras drogas con el alcohol que de no haberse hecho seguramente no habrían ocurrido.  ¿Que defensa tienen los prohibicionistas ante tan espectaculares y dramáticas cifras?

Dentro de la información sobre drogas  que necesariamente debe de tener la juventud una de las principales es:

TOMAR MÁS DE UNA DROGA AL MISMO TIEMPO TIENE EFECTOS IMPREDECIBLES. AUMENTA LOS  RIESGO Y EL PELIGRO DE MUERTE POR SOBREDOSIS, DE MODO MUY PARTICULAR CON

EL ALCOHOL

NO DEBEN DE MEZCLARSE DROGAS

Pasemos a ver que efectos produce la mezcla más popular que es la mezcla de droga con alcohol

CANNABIS y ALCOHOL

Si se mezcla con alcohol, se potencian los efectos depresores y por ello es más probable que puedan aparecer efectos secundarios como es una bajada de presión y desorientación. Ante la aparición de palidez, mareo, pérdida de fuerzas, sudor frío, es preciso dejar de fumar y beber, sentarse en un lugar tranquilo y fresco y tomar algo con azúcar.

MDMA y ALCOHOL

Estas dos sustancias se potencian negativamente tanto en los efectos fisiológicos como psicológicos. Mezclar MDMA con alcohol es una manera de enturbiar una experiencia potencialmente placentera e incrementar la aparición de efectos secundarios, como la deshidratación, nauseas, hipertermia o golpe de calor, riesgos para el hígado y sobre todo la fácil perder el control. Estudios recientes concluyen además que la combinación de MDMA y alcohol se potencian en su acción depresora del sistema inmunitario, por lo que se tiene mayor riesgo de contraer enfermedades infecciosas al exponerse a ellas (gripes, por ejemplo).

SPEED y ALCOHOL

 Los problemas tienen que ver con la regulación de la temperatura y la pérdida de líquidos (incremento de la deshidratación e hipertermia o golpe de calor), de aquí que tenga especial importancia aconsejar la ventilación y la ingestión de agua. El alcohol altera el metabolismo de la anfetamina aumentando su concentración en el plasma sanguíneo impidiendo la degradación. Es decir, prolonga sus efectos, aunque también reduce su acción y no se nota la borrachera. Bajo los efectos del speed, el consumo de ambas sustancias aumentará considerablemente

COCAINA y ALCOHOL

 Efectos contrarios sobre el sistema nervioso central. Los efectos del alcohol y la coca son opuestos aumentando el deseo de consumir más, no te das cuenta y te afecta físicamente. La cocaína y el alcohol, que se consumen a menudo conjuntamente, disimulan mutuamente sus efectos. Por eso cuanto más alcohol se consume más cocaína se desea tomar, y viceversa. Así, el alcohol hace disminuir los efectos de rigidez y tensión de la cocaína, mientras que ésta contrarresta los efectos de borrachera. Aparece la tendencia a crear un círculo vicioso de consumo de las dos sustancias con lo que supone de gasto monetario y mayores riesgos para la salud. Existe el riesgo de llegar a una intoxicación aguda o coma etílico sin darse cuenta, como también es cierto que a más alcohol, más resaca.

KETAMINA y ALCOHOL

Mezclar ketamina con alcohol, barbitúricos, benzodiacepinas, opiáceos o GHB puede ser muy peligroso, pues aumentan las posibilidades de perder el conocimiento y sufrir una depresión respiratoria o un paro cardíaco. Con el consumo conjunto de alcohol también aumentan las ganas de vomitar y esto puede alargar el tiempo de recuperación. El alcohol potencia sus efectos depresores, es decir, una hace que la respiración vaya más lenta y el corazón también, y puede producirse la muerte.

GBH y ALCOHOL

Se potencian los efectos depresivos del anestésico con el alcohol y por ello se incrementan los riesgos: pérdida de conocimiento, aturdimiento, intensa somnolencia e incluso puede llevar al coma. La mayoría de problemas por llegar a estados de coma se han dado por mezclas con alcohol.

ANTIDEPRESIVOS y ALCOHOL

La mezcla de dos depresores puede generar sobredosis. La combinación de sus efectos te puede volver irracional y violento.

EL  CONSUMO DE PLACER DEBE DE SER UN CONSUMO RESPONSABLE Y SENSATO SIN PRETENDER CAER EN PRUEBAS O AVENTURAS PELIGROSAS Y EN EL QUE LA BALANZA ENTRE PLACER Y PROBLEMAS DE SALUD SE INCLINE A FAVOR DEL PLACER PROVOCANDO LOS MÍNIMOS EFECTOS NOCIVOS PARA EL CUERPO HUMANO, Y QUEDA CLARO QUE LAS MEZCLAS POTENCIAN ESTOS EFECTOS NEGATIVOS.

Según la RAE PLACER es: Satisfacción, sensación agradable producida por la realización o suscepción de algo que gusta o complace. No lo conviertas en un antónimo, SUFRIR.