1 de junio de 2012.-
El número de nuevas drogas en la Unión Europea se ha más que duplicado en los últimos dos años y alcanzó su mayor nivel histórico en 2011, cuando surgieron 49 sustancias psicotrópicas en la mancomunidad.
Es lo que indica el más reciente informe de la Oficina Europea de Policía (Europol) sobre el mercado de drogas ilegales en la mancomunidad.
El gran salto se dio entre 2009 y 2010: en ese período, la cantidad de sustancias por primera vez detectadas aumentó de 24 hasta 41.
Según Europol, la creación de nuevas drogas se ha tornado un “fenómeno global que se está desarrollando a un ritmo sin precedentes”.
“La velocidad con la que nuevas drogas aparecen en el mercado desafía los procedimientos habituales de vigilancia, respuesta y control del uso de sustancias psicotrópicas”, alertó el informe.
La agencia también llama la atención para el hecho de que algunos de los productos identificados en 2011 eran vendidos de manera legal a través de Internet o en tiendas especializadas.
Es el caso de la mefedrona, una catinona sintética con efectos psicotrópicos similares a los de las anfetaminas, sólo recientemente incluida en la legislación sobre drogas de casi todos los países europeos, con la única excepción de Holanda.
Las catinonas sintéticas suman, junto con los cannabinoides sintéticos, dos tercios de las nuevas sustancias notificadas el año pasado, así como en 2010, de acuerdo con Europol.
El número de tiendas online que ofrecen al menos una sustancia o producto psicotrópico aumentó de 314 en enero de 2011 hasta 690 en el mismo mes de este año.
“Ahora vemos nuevas drogas promocionadas en paquetes atractivos en Internet o vendidas en clubes nocturnos”, constató el director del Observatorio Europeo de la Droga y la Toxicodependencia (OEDT), Wolfgang Götz.
“No importa cual sea la fuente, se trata de un peligroso juego de ruleta que están jugando aquellos que consumen una variedad cada vez mayor de polvos, píldoras y mezclas sin conocer exactamente las sustancias que contienen y sus potenciales riesgos para la salud”, señaló.
No obstante, Europol acreditó que el aumento en la cantidad de nuevas sustancias detectadas se debe también al refuerzo de las capacidades de los sistemas nacionales de alerta temprano mantenidos por los países europeos.
La mayoría de las notificaciones de 2011 procedieron de Reino Unido, Alemania y Finlandia, seguidas de Dinamarca, Bélgica, Polonia, Letonia, Países Bajos, Hungría, Austria, Bulgaria, Suecia y Francia.
Fuente: Vanguardia