16 de septiembre de 2012.-
Esta iniciativa está en el marco de un protocolo difundido entre todos los ayuntamientos catalanes. Así lo explicó a Ep el subdirector general de Drogodependencias de la Agencia de Salud Pública, Joan Colom, quien señaló que «la Ley de Seguridad Ciudadana permite sancionar a estos jóvenes con 300 euros o bien realizar una actividad educativa o terapéutica».
Ahora la Generalitat quiere generalizar, mediante la «Guía de recomendaciones para la implementación del protocolo de prevención de drogas alternativa a la sanción administrativa», unas pautas comunes en los ayuntamientos para incentivar precisamente las medidas pedagógicas, añadió. Las medidas educativas deben «permitir trabajar correctamente con los padres en una atención coherente» para aumentar el conocimiento y la capacidad crítica del menor, argumentó Colom, que no se mostró partidario de las sanciones. El objetivo último de la medida pasa por «disminuir los riesgos asociados al consumo de drogas», dijo.
Un total de 782 menores denunciados por posesión o consumo droga en Barcelona siguieron en 2010 el programa de atención psicoeducativa de la Agencia de Salud Pública de la ciudad, lo que supone un 80 por ciento del total de denunciados, 1.323, entre ese año y el anterior. Además, la Guardia Urbana y los Mossos d’Esquadra entregaron 717 menores a sus padres desde 2008 hasta el año pasado por consumir alcohol y también drogas en la vía pública.
Fuente: La Razón