Diario: El Mundo
Fecha: 11/05/2002
Palabras clave: Cocaína, Adictos, Alucinaciones
Tema: Cocaína
DROGAS / ENCUENTRO NACIONAL DE PROFESIONALES
Ocho de cada 10 adictos a la cocaína padece alucinaciones
El abuso provoca a menudo trastornos obsesivo compulsivos y de personalidad
RAFAEL J. ALVAREZ
ARANJUEZ (MADRID). Vivir dependiendo de la cocaína implica la aparición de trastornos psicóticos en algún momento de ese trayecto adictivo. O sea, alucinaciones e ideas delirantes como puñales más o menos esporádicos. También las rayas multiplicadas provocan alteraciones de la personalidad, crisis de angustia, fobias y trastornos obsesivos compulsivos y de estrés post traumático.Menos frecuente es la aparición de una esquizofrenia como consecuencia directa de la adicción a esta droga con tan buena prensa.
Son parte de las conclusiones que el doctor Alvaro Rivera presentó ayer en la segunda jornada del Cocaína: Encuentro Nacional para Profesionales, que ha reunido a 400 expertos atraídos por la Agencia Antidroga de la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Aranjuez. Rivera lleva un año al frente del Centro de Atención Integral al Cocainómano Nuestra Señora de la Paz, financiado por la Agencia Antidroga, y ayer contó lo que ha visto en un buen puñado de pacientes a lo largo de 12 meses. Por ejemplo, dijo que «la mayor parte de las depresiones en adictos a la cocaína son secundarias, es decir, se desarrollan posteriormente al inicio de consumo de la cocaína».
El 80% de los ingresados en el centro han sufrido síntomas psicóticos (alucinaciones) derivados directamente del consumo de coca en algún momento de su historia adictiva. Sin embargo, Rivera ha encontrado una «baja tasa de esquizofrenia en los pacientes».En esquizofrénicos «es más frecuente el consumo de coca que en la población en general». Lo que sí parece claro es que la cocaína empeora la enfermedad: «Más recaídas, peor cumplimiento del tratamiento y necesidad de mayores dosis de fármacos».
Amador Calafat, vicepresidente del colectivo Socidrogalcohol, disertó sobre la coca y la cultura recreativa: «La cocaína es peligrosa y perversa para algunos, pero no para todos. Ese hecho fortalece la idea de que el problema está en los individuos que la consumen, unos son fuertes y otros fracasan, versión muy pertinente en esa dinámica individualista y neoliberal que se acopla tan bien al consumo de cocaína».