Diario: Diario de Navarra
Fecha: 04/10/2002
Palabras clave: Fumadores, Desintoxicar, Hábitos
Tema: Publicidad
El 35% de los fumadores no se plantea en ningún momento dejar el tabaco
Los expertos aconsejan la terapia farmacológica y psicológica
Las nuevas prácticas para desintoxicar a los fumadores pasan por una "terapia individual que incluya el tratamiento farmacológico y el psicológico", ayudas que han logrado que un 35% de los adictos al tabaco abandonen este hábito, "una droga que crea más adicción que la heroína".
Así lo explicó ayer en rueda de prensa el presidente de la Sociedad Española de Especialistas en Tabaquismo, Carlos Jiménez Ruiz, quien participa en un congreso sobre las formas de combatir la adicción al tabaco organizado por la Society for Research on Nicotine and Tobacco (SRNT) y que reúne en Santander a expertos internacionales y nacionales. Cada fumador tiene su motivo para dejar de fumar: la salud, el ahorro, no dar un mal ejemplo a los hijos, la prevención de las arrugas o, en el caso de muchos hombres, evitar la impotencia, explicó el presidente del comité organizador del Congreso, Javier Ayesta.
Contra el engaño
Aún así, y "a pesar de ser una droga más", el 35% de la población fumadora de España "es feliz, y no se ha planteado en ningún momento dejar el hábito", mientras que la mitad lo está intentando desde hace un tiempo y un cinco por ciento "lo dejaría ya mismo". Lo normal no es conseguirlo a la primera, dijo, sino que se logre después de intentarlo varias veces, y sobre todo después de alternar el apoyo psicológico con un tratamiento farmacológico, la "única forma demostrada científicamente de acabar con la adicción".
Por ello, precisó Jiménez Ruiz, es importante que la publicidad "no engañe". Ayesta matizó que los anuncios influyen también en que muchos adolescentes fumen, "porque los niños se sienten presionados por los mensajes de las tabacaleras", y "digo niños porque algunos empiezan muy jovencitos a fumar", a los 11, a los 13 o a los 15 años, pero "el primer cigarrillo es el más pensado, implica una reflexión previa de los menores". En cuanto al papel de las administraciones públicas, Jiménez Ruiz indicó que medidas como la nueva normativa presentan "aspectos muy positivos", el primero de los cuales establece que desaparecerá la categoría "light", lo que a su juicio hará que todo el mundo sepa "que no hay una forma segura de fumar". Los otros dos puntos hacen referencia a los mensajes y su superficie en la cajetilla, que aumenta, y contendrá frases que irán cambiando para más efecto.